La mayoría de los adultos alrededor del mundo “tienen en poco” a lo niños y desestiman su espiritualidad porque son “solo niños”. Jesús los estima como que “de los tales es el reino de los cielos” (Mateo 19:14).

El Hombre, la Gloria cumbre de la creación, está hecho a imagen de Dios y destinado a la inmortalidad. Cada niño tiene gran potencial, creatividad, capacidad de pensar y razonar, soñar y visionar. ¡Cada uno es ennoblecido con dignidad y valor! A los ojos de Dios, todos los niños son iguales e imputados con valor independientemente de su posición en la vida y de sus habilidades.

Los métodos de AMO® son distintivamente bíblicos:

  • ¡Se proclama el Evangelio!
  • Se nutre al niño de forma integral: mental, espiritual, estética, física y socialmente.
  • Se comparte el amor mediante relaciones, proyectos de servicio y eventos en la comunidad.
  • Se imparte la verdad en cada lección.
  • Se inspira la creatividad mediante las bellas artes.
  • Se cultiva la imaginación cristiana.
  • Se conmemora la Mano de Dios en la historia.
  • Se práctica el pensamiento y razonamiento reflexivos con la Palabra de Dios en cada lección.
  • Se enseña que el carácter es causativo, no resultado del ambiente.
  • Se incluye a los padres mediante tarjetas de bendición y oración.
  • Cada niño mantiene un registro escrito de su aprendizaje.
  • Se celebra el aprendizaje mediante música, drama y festivales.